Rafael Jané Ferrer y su hermano, Santiago, fundan La Clínica Americana, así llamada porque aporta las técnicas más avanzadas ya disponibles en EEUU. Situada en Paseo de Gracia, se convierte en un centro puntero en España.
La Clínica Americana se traslada al Paseo Bonanova, con una imagen más moderna y un nuevo nombre, que representa el estilo familiar de la odontología.
Se incorporan al equipo Santiago, Luís y Rafael Jané Noblom, y la clínica sigue creciendo.
En 1999, Santiago Jané Ferrer fallece, dejando un legado para la posteridad. Odontoclínica Jané se traslada a la calle Pomaret. La saga continúa, y nuevos profesionales de la familia se incorporan.
Luis Jané Noblom, y sus hijos Luis y Adela, se trasladan a la actual localización en la calle Mariano Cubí. La Clínica mantiene su espíritu de innovación y servicio de siempre, en un entorno hermoso, moderno y acogedor.